domingo, 2 de mayo de 2010

NUESTRO MODELO EDUCATIVO

El modelo educativo actual, cumplió su papel en otra época, pero las necesidades de la sociedad han cambiado de forma radical en los últimos años, y nada justifica el mantenimiento de un sistema obsoleto, que ya no cumple su función.
Ya no estamos en la Era Industrial, sino en la Era del Conocimiento y la Colaboración. En consecuencia, la sociedad demanda con urgencia cambios profundos en el sistema educativo.
Sin embargo, el legado del modelo anterior se resiste a desaparecer. Son los propios alumnos, los que están manifestando su rechazo de una manera más contundente. Ellos no son como nosotros. Tienen otras aptitudes y otras necesidades muy distintas.
Ya no están dispuestos a soportar el sistema de aprendizaje homogéneo y unidireccional que recibieron las generaciones anteriores. Y, por desgracia, esta desafección se está manifestando, a menudo, en un alto porcentaje de abandono escolar.
Cambiar nunca ha sido fácil, mucho menos cuando no sabemos exactamente hacia dónde nos dirigimos. Pero está claro que en este escenario, el rol de los profesores ya no puede consistir en suministrar el contenido. Su papel, debe ser el de gestionar y facilitar el proceso de aprendizaje y el crecimiento intelectual de cada uno de los alumnos, estimulando su creatividad y su sentido crítico.

La escuela rural debe convertirse en un centro de divulgación de nuevas y apropiadas tecnologías especialmente dirigidas hacia aquellos jóvenes que, por diferentes razones, no seguirán estudiando. Lo señalado anteriormente generara en los profesores un cambio de actitud respecto al quehacer pedagógico lo que se podría, resumir en:
1) El Salón de clases que es el lugar donde se efectúa el proceso de aprendizaje no siempre debe ser un lugar cerrado.
2) Privilegiar el aprendizaje por sobre la enseñanza, vale decir hablar del P.A.E. (Proceso Aprendizaje Enseñanza) y no P.E.A. (Proceso Enseñanza Aprendizaje).
Es decir, si hay soluciones, se necesita decisión política, mayor presupuesto, decisiones de fondo y no de forma; que si el descanso hace parte o no de la jornada laboral, que si el estudiante esta por fuera del aula esta perdiendo tiempo, que las instituciones que mas someten a los profesores y a sus alumnos son las que producen mejores resultados, etc.
Cuando, de verdad propondremos un cambio de nuestro modelo educativo teniendo en cuenta las características especiales de las nuevas generaciones?

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